Catorce de las demarcaciones y la isla Saona se encuentran en amarillo y 18 en verde. En alerta amarilla están: el Distrito Nacional y las provincias Santo Domingo, La Altagracia, San Cristóbal, Samaná, Monte Plata, Hato Mayor, El Seibo, Samaná, Peravia, San José de Ocoa, Azua, Barahona y Pedernales.
Mientras que en alerta verde están: Santiago, Espaillat, La Vega, Monseñor Nouel, Duarte (en especial Bajo Yuna), Hermanas Mirabal, La Romana, Puerto Plata, María Trinidad Sánchez, Dajabón, Sánchez Ramírez, Valverde, Peravia, Montecristi, Santiago Rodríguez, Elías Piña, San Juan e Independencia.
De acuerdo al informe, estas condiciones estarán provocando aguaceros de moderados a fuertes con tormentas eléctricas y ráfagas de viento desde tempranas horas del martes en localidades de las regiones: noreste y el litoral costero del caribeño.
- Estas precipitaciones se intensificarán en horas de la tarde hacia poblados de las regiones: noroeste, valle del Cibao, cordillera Central y la zona fronteriza.
En virtud de lo anterior y lo establecido en el artículo 2 capítulo 1, de la ley 147-02, sobre gestión de riesgos, este Centro de Operaciones de Emergencias (COE), Modifica el nivel de alerta verde, por posibles crecidas de ríos, arroyos y cañadas, así como inundaciones urbanas y repentinas.
El COE recomienda a la población a mantenerse en contacto con la Defensa Civil, Fuerzas Armadas, Cruz Roja, la Policía Nacional, Cuerpos de Bomberos y la propia entidad a través del Tel: 809-472-0909, 9.1.1, *462 de la OPTIC.
Asimismo, seguir los lineamientos y orientaciones de los organismos de protección civil.
Ante la ocurrencia de aguaceros, los residentes en zonas de alto riesgo que habitan próximo a ríos, arroyos y cañadas deben de estar atentos y tomar las medidas de precaución necesarias ante posibles crecidas e inundaciones repentinas.
También deben abstenerse de cruzar ríos, arroyos y cañadas que presenten alto volúmenes de agua, no hacer uso de balnearios, en las provincias bajo alerta.
A los conductores de vehículos deben tomar las medidas preventivas de lugar, debido a la reducción de visibilidad, generada por las lluvias.