La procuradora adjunta Yeni Berenice Reynoso sostuvo ayer que cuando Pagán Rodríguez llegó a la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (OISOE), el 3 agosto de 2015, “estaba literalmente quebrado” y que tenía múltiples demandas por girar cheques sin fondos, le habían ejecutado dos hipotecas de su casa y una finca de limones ubicada en Monte Plata.Berenice Reynoso explicó en el tribunal que, a pocos días de dejar el cargo, el exdirector de la OISOE gestionó el pago de alrededor de 1,000 millones de pesos a favor de Domedical Supply SRL, una de las empresas de Alexis Medina.
Refirió que la propia consultora jurídica de la gestión de Pagán Rodríguez testificó que el exfuncionario, quien acostumbraba a despachar desde un restaurante de la capital, aceptaba sobornos e, incluso, construía obras de la propia OISOE a través de otras personas.Tocado el turno a Francisco Pagan, hizo un resumen de su vida y tras ser preguntado por el juez Alejandro Vargas sobre la vinculación que le hace el Ministerio Público con el imputado Alexis Medina, guardó silencio y solo se limitó a decir que sus abogados responderán al respeto.
Mientras, Carlos Salcedo, abogado del exdirector de la OISOE) acusó anoche al ministerio público de construir un mundo de mentiras en su solicitud de medida de coerción contra su defendido implicado en el caso Anti-Pulpo.El jurista reveló que una compañía de Alexis Medina Sánchez, hermano del expresidente Danilo Medina, suplió el 40% de equipos para hospitales y el otro 60% una empresa que el ministerio público no se preocupó por investigar cuál es.
Dijo que Pagán incluso inició una “descubicación” para sanear ese proceso en la institución estatal y justificó el pago de anticipos para obras amparados en la ley.
La defensa del exdirector de la OISOE dijo que no hay ninguna prueba contra su defendido que demuestre las acusaciones de falsedad de escritura, desfalco, enriquecimiento ilícito, estafa y soborno.
Dice desde pequeño aprendió a sonar
Con relación a Santiago Muñoz, Berenice Reynoso alega que este era uno de los principales testaferros que permiten camuflar múltiples propiedades, empresas y transacciones millonarias de Alexis Medina en el entramado de corrupción.
Sostuvo que el imputado en su condición de testaferro, figura como propietario de una villa en Jarabacoa de 26 millones de pesos, diversas porciones de terreno en Moca y San Pedro de Macorís, con valores individuales de hasta 11,900 metros cuadrados.Igualmente, apartamentos en los condominios Fígaro V y Costa del Sol, que al igual que los demás inmuebles citados, son propiedades de Alexis Medina, al tiempo que lo acusa de estafa al Estado y de lavado de activos.
Sin embargo, Santiago Muñoz se definió como un hombre que de pequeño “aprendió a soñar” y que ha prosperado a partir de su actividad como importador y de otras actividades comerciales. Fuente:Listindiario