Elías Piña,
(Comendador), 03 nov. 2012.- Ser la provincia más lejana de la capital
dominicana, no sólo perjudica sus habitantes por que no reciben los
beneficios de otras que tienen mayor desarrollo, sino que cuando aquí
reclaman, pocos nos escuchan. Desde el terremoto en Haití el pasado enero 2010,
nuestros hermanos vecinos se han mudado a esta parte de la frontera
dominico-haitiana, los parques están habitados por estos extranjeros por
las noches, quienes lo usan como camas, ya que vienen hasta aquí en el
día, pero no regresan a su país.-
De igual manera ocurre con los que trae hasta aquí la Dirección General
de Migración, a estos repatriados los dejan en el parage el carrizal,
desde donde regresan a la ciudad, para esperar la oportunidad de volver a
la capital dominicana, muy pocos van hacia Haití.-
Lo nuevo ahora es que cada día aparece una persona con problemas
mentales caminando por las calles de Comendador, y lo hacen en su
idioma, el creole.- Aunque existen instituciones para prohibir la
entrada, y transito de indocumentados, no sabemos si alguien trabajará
por los que están con esta situación de salud (locos), ya que los que
deambulan en esta ciudad vienen desde haití, por que al parecer para
salir de ellos, sólo lo traen a la línea divisoria en la frontera.--